Practicar ejercicio físico es sinónimo de salud, si además lo convertimos en un hábito conseguiremos múltiples beneficios físicos y mentales. Te dejamos 3 ejemplos:
1- FORTALECIMIENTO DE MÚSCULOS Y HUESOS
El ejercicio convertido en rutina juega un papel vital en el mantenimiento de músculos y huesos fuertes. El proceso de envejecimiento conlleva una pérdida de masa muscular, lo que puede derivar en lesiones y discapacidades.
2- MEJORA DE LA SALUD MENTAL
Mens sana in corpore sano. Porque el ejercicio contribuye significativamente a mejorar nuestra función cerebral y proteger la memoria y habilidades cognitivas.
3- FELICIDAD
Es objetivo: hacer ejercicio te hace más feliz.
El ejercicio mejora notablemente nuestro estado de ánimo y disminuye sentimientos negativos como la ansiedad o el estrés.
Tu estado de ánimo mejora sin importar la intensidad de la actividad física.
No es cuestión de tiempo, sino de hacerlo. ¿a qué esperas? 😊